A mediados de los años 2000, el Borussia Dortmund era un equipo al borde del quiebre.
Sus financias iban de mal en peor y la sostenibilidad económica del club no era viable.
Hasta que un nuevo modelo de financiación en el que fueron involucrados los hinchas y los accionistas cambió algo, impulsando un fútbol más sano desde las raíces, siendo hoy en día el club de la Ruhr una referencia del fútbol alemán y lleva consigo una serie de años en la élite europea, es sobre todo a causa de su modelo sostenible de formación futbolística.
Gracias a ello, de hecho, un técnico como Jurgen Klopp, que procedía del Mainz, pudo tirar el equipo a flote y convertirlo en una realidad imponente, llegando también a ganar un título de campeón de Alemania antes del dominio despótico del Bayern Munich y como olvidar la final de la Champions League 2012-13, en la que los hombres de Klopp perdieron en Wembley por la mínima contra sus rivales nacionales tras haber disputado una excelente competición. Aquel Dortmund fue probablemente la mejor versión de un club que puede contar con el soporte y la fortaleza de una afición única en un estadio único, aquel Signal Iduna Park en el que el famoso muro que se despliega en cada partido para intimidar a los rivales.
Su modelo de formación futbolística es el mejor de Alemania, como demuestran los 32 futbolistas de élite que juegan hoy en los mejores torneos nacionales europeos y que han salido del club de la Ruhr.
Entre ellos destacan sin duda Robert Lewandowski y sobre todo Ilkay Gundogan, que hoy es una pieza clave del Manchester City de Pep Guardiola. En este contexto, si bien no proceda del sector juvenil de este club, Ousmane Dembélé es otro de los elementos top que han sido explotados en el Dortmund, cuando el actual técnico del Psg Thomas Tuchel cogió el relevo de Klopp.
El aspecto en común entre estos dos entrenadores y el actual técnico Lucien Favre es la filosofía de juego del nuevo DT del Borussia: todos hacen hincapié en un juego directo, vertical y en velocidad. Ahora, después de seis años de dominio absoluto del Bayern, el Dortmund dio un golpe sobre la mesa en la victoria del gran clásico alemán contra los bávaros, en los que sus hombres han acabado imponiéndose por 3 a 2, con Marco Reus, hombre de la casa y único sobreviviente de la final de Champions, como gran protagonista.
Los 27 puntos cosechados hasta ahora en Bundesliga están proyectando al Borussia en la cumbre de la tabla, donde se encuentran en solitario y con 7 puntos de ventaja sobre el Bayern, que todavía no ha encontrado su identidad desde que Niko Kovac ha sido nombrado entrenador.
Con Pulisic y Reus como extremos rápidos y contundentes y un Paco Alcácer que se está inflando a goles, el ataque del Dortmund de este año parece imparable y es la enésima prueba de la filosofía ofensiva de un club con un modelo de fútbol sostenible y exitoso.